Overview

En el cruce de dos realidades artísticas, Katinka Huang y Claire Bendiner se alzan como luminarias que, aunque en diferentes sintonías, entrelazan sus visiones en un diálogo conceptual que trasciende lo convencional. Dos artistas, dos narrativas, una propuesta expositiva que desentraña las profundidades del ser y el espacio.

Katinka Huang, una viajera de mundos y culturas, se embarcó en una odisea desde China a Inglaterra, una odisea solitaria en su juventud. En un internado femenino, chocó con la ideología occidental sobre género y propiedad, que chocaba con la feminidad oriental que llevaba en su esencia. Este choque encendió la chispa de su exploración de la psicología femenina. Para lidiar con su confusión y alienación, creó alter-egos que la ayudaron a trascender. Sus figuras satíricas de mujeres con cuerpos distorsionados y animalescos dan voz al absurdo y a estados emocionales turbulentos.

En las pinturas mixtas de Katinka Huang, las figuras celebran el enigma de la psicología femenina, desafiando la histórica definición occidental de la mujer histérica como "indómita", "temerosa", "neurótica" y, sobre todo, "con un fuerte deseo sexual". Este estigma persiste en la actualidad, retratando a las mujeres como "demasiado emocionales, intensas o sensibles". Katinka Huang teje cuentos de la historia pasada y presente, fusionando relatos del siglo XIX del neurologo francés Jean Martin Charcot, quien convertía a las mujeres histéricas en objetos de espectáculo público, con las mujeres contemporáneas cuyo comportamiento "histérico" es sensacionalizado por el mundo.

En su búsqueda, Katinka Huang desentraña la psique femenina mutilada, diseccionando el origen de su propio trauma como mujer. Sus obras se convierten en un diario personal, donde personas y lugares de su vida cotidiana toman forma como criaturas monstruosas o sacarinas, alternando entre antagonistas y protagonistas.

Claire Bendiner, por otro lado, se adentra en la abstracción del espacio, conectando los hilos de la memoria, el yo y el entorno. Cada una de sus composiciones es una ventana personal a diferentes lugares familiares y vivencias. Interiores domésticos, vestíbulos de salas de espera, circuitos urbanos, sótanos subterráneos y cabinas de automóviles se convierten en metáforas visuales a partir de sus recuerdos y referencias. Claire Bendiner elude las representaciones convencionales en favor de decisiones materiales y formales que capturan la esencia de estos espacios.

Sus obras no aspiran a ser fotografías, sino a evocar pensamientos. Claire Bendiner destila la realidad en sus elementos más básicos: forma, color y línea. Las paredes y tabiques, símbolos previos de aislamiento, se disuelven en trazos porosos. Campos de color saturado impregnan la membrana del óleo y el acrílico. El uso de pintura doméstica desdibuja la línea entre el arte y el diseño de interiores, la artesanía y lo cotidiano.

La discontinuidad entre el yo y el entorno se manifiesta en sus obras, capturando la desorientación que experimentamos en espacios de transición como los aeropuertos, donde las identidades convencionales se desvanecen. Sus pinturas, vertiginosas y fugaces, trazan la conciencia situacional, revelando nuestra relación paradójica con la contención, tanto temida como anhelada.

“LO QUE TÚ VES" es una invitación a explorar la complejidad de la psique femenina y el laberinto de la abstracción espacial, un viaje que desafía nuestras percepciones y nos sumerge en la riqueza de la experiencia humana
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